Tal vez porque es importante descubrir algo sobre el pueblo donde nació el Gran pintor José María Velasco.

En esta ocasión quiero invitarlos a visitar Temascalcingo, a que caminen por sus calles, a subir lo que hasta hace poco pensábamos que era un cerro en la comunidad de San Pedro El Alto y resulto ser un volcán. Los invito a transitar al margen del rio Lerma, a descubrir sus cuevas y barrancos donde hay fósiles de animales prehistóricos. A visitar las pinturas rupestres “Tzindo”, ubicadas en uno de los barrios de la cabecera municipal, también los invitó a que visiten los centros ceremoniales del cerro de la campana, próximo a la comunidad de Calderas, El Calvario, y a disfrutar de la vista Panorámica de la cabecera municipal rodeada de cerros y abierta a la plenitud del valle de Solís. Vengan a conocer la Ex Hacienda de Solís y sus pocos más de 500 años de vida dando sustento y economía al pueblo, en donde por azares del destino, en el año de 1810 hospedo al cura Hidalgo y a su ejército en el camino a la libertad independencia del pueblo mexicano.

O puedo invitarlos también a que descubran las Haciendas de San Vicente, San Francisco y La Huerta, que en el Porfiriato fueron el motor de la economía de este gran pueblo que es Temascalcingo. Los invito a que visiten el Centro Regional Cultural José María Velasco, situado en la casa de un niño que un día salió de su pueblo y se convirtió en el más grande paisajista que ha dado México.

Asistan a presenciar las tradiciones culturales del pueblo como son la representación de la pasión de Cristo y la Hermandad de los Crucíferos, que tienen más de 100 años realizándose. U observen el tradicional Jueves de Corpus con sus Viejos danzando pidiendo por las lluvias y las buenas cosechas. También los invito a que se paren un rato frente a nuestra Iglesia y admiren su construcción que fue realizada sobre el dolor del pueblo, ya que la mañana del 19 de noviembre de 1912 se despertó con la desgracia de un temblor que acabo con gran parte del edificio.

Recorran su jardín, su quiosco y su reloj que tienen más de un siglo de construcción y le dan una identidad a Temascalcingo. Conozcan lo que queda del Seminario Conciliar, que fue la casa donde se albergaron los futuros sacerdotes durante una de las épocas más complicadas para la iglesia católica. En un recorrido hagan un alto en los pueblos de Santiago Coachochitlán y Santa María Canchesda para que admiren las artesanías de los alfareros temascalcinguenses.

Los convoco a que no solo caminen por las calles, parajes y paisajes de Temascalcingo, sino que vivan, conozcan y descubran al pueblo y su Historia.